Mimi Plumb solía vivir en las afueras de la ciudad donde los alquileres eran más baratos. Cerca de allí, en la cima de la colina, había capas plegadas de radiolarita, una roca sedimentaria compuesta por los esqueletos fosilizados de unas criaturas microscópicas llamadas radiolarios. Una gran grieta en la ladera era un recordatorio de la constante amenaza de terremoto.
Warm Water Cove, a lo largo de la bahía, era un espectáculo de llantas y coches abandonados. Un día Plumb fotografió la chimenea de la central eléctrica mientras las llamas destruían el muelle de la calle 25. Observaba los aviones que sobrevolaban el vertedero municipal repleto de montañas de cartón.
“Los edificios del centro, en el horizonte lejano, me recordaron a Oz. Mi gata, Pearl, vigilaba desde la azotea de mi piso” - Mimi Plumb.
La vida de Plumb estuvo marcada por las noches bailando al ritmo de Crystal Pistol en el Mission, o escuchando al grupo de polka punk en el Oasis. Neil, que tocaba el clarinete, vestía pantalones de piel sintética y llevaba cresta en la cabeza. Algunas veces jugaban al billar en el Palace Billiards. En el Exotic/Erotic Ball un piloto y una enfermera se escondían en las oscuras esquinas. Un hombre trajeado escrutaba a Plumb con mirada gélida mientras ella disparaba su flash contra el.
Plumb gastaba sus días visitando escuelas abandonadas y gasolineras en ruinas, una valla publicitaria decía "Peligrosamente parecido a lo casero".
Para Plumb, el sonido mágico de los teleféricos de San Francisco estaba a un mundo de distancia, y el idealismo de la década de 1960 parecía haberse ido. La ciudad dorada de San Francisco, deshilachada en sus bordes, mostraba el abismo creciente entre ricos y pobres.
Las imágenes de "The Golden City" fueron tomadas entre 1984 y 2020.
Primera edición (2022)
Primera impresión
Tapa dura de gran formato