Pierre-Elie de Pibrac ha vivido en inmersión durante más de un año en diferentes familias de la comunidad azucarera en Cuba, trabajadores de la industria azucarera y revolucionarios desde el principio. A través de esta experiencia, el fotógrafo cuestiona el fin de la utopía en una población que ha creído y trabajado por la encarnación del sueño del castrismo. Realizados con una cámara de gran formato, los retratos en color de la comunidad marcan el “reportaje” en blanco y negro de su vida cotidiana donde el tiempo se siente como suspendido: el interior de las casas domésticas, los dormitorios, las calles abandonadas invadidas por la hierba, los antiguos sitios de producción, la sección de caña de azúcar en los campos… Este proyecto muestra cómo la población cubana capta hoy su vida cotidiana, qué mirada tiene sobre su historia reciente. Una novela corta de la autora Zoé Valdés, inspirada en estas fotografías, arroja otra luz sobre este recorrido visual.
Tapa dura,
21,6 x 28,8 cm
216 páginas,
140 fotografías en B/N y color
Texto (en francés y español) Zoé Valdés