Tras ser desahuciadas por no poder hacer frente al pago del alquiler, varias familias gitanas fueron forzadas a vivir en la calle, bajo el puente de la autopista a su paso por Badalona. Allí se acercó el fotógrafo documental Jordi Oliver con la intención de convivir con ellos y denunciar a través de la imagen aquella dura realidad. Tras varios meses de visitas, una de las madres, preocupada por si los trabajadores sociales se llevarían a sus hijos, les propuso una idea: «Vamos a escribir una carta a nuestra majestad el Rey, él nos ayudará.»
Este reportaje, que pone en relieve el valor de la familia y el perpetuo estigma social que sufre la comunidad gitana, intentó sin éxito ser publicado, hasta hoy, 26 años más tarde.
Primera edición, 2021 52 páginas 16 x 21 cm